La aventura de Aventurera
Quizá todo comenzó cuando un elenco enorme se desmembró y lanzó al pasado “Cada quien su vida”. Tradicional obra decembrina de Luis G.Basurto, que relata una noche cabaretera, festiva y trágica. Mucho tiempo después de mantenerse guardada, recobró fuerza en el nuevo Salón México, recuperado en 1993 por María Rojo y Miguel Nieto, a unos metros de su sede original, sólo que ahora en lo que fue una subestación eléctrica de la colonia Guerrero.
Carmen Salinas, Héctor Bonilla, María Rojo, Alberto Estrella, Margarita Isabel, entre otros, formaban el reparto. Unas semanas en cartelera y cerró el telón.
Poco tiempo después se anunció otro montaje con tintes similares, ahora en el Salón Los Ángeles, nuevamente tenía como entorno un barrio popular y un tradicional salón de baile.
El escritor de obras de teatro y telenovelas Carlos Olmos tuvo la misión de retomar Aventurera, la historia del también escritor Álvaro Custodio que en 1949 llevó al cine con Ninón Sevilla, Andrea Palma y Tito Junco.
Ahí comenzó otra historia, la protagonista Edith González y un elenco de nuevo diverso y completo con Carmen Salinas y Ernesto Gómez Cruz, la noche del 27 de agosto de 1997 comenzó la nueva vida de la Aventurera.
Es posible que la remembranza de una época ida, del ambiente de cabaret extinto y de las películas de rumberas, significaran para el público una atractiva oportunidad de asistir a un salón de baile, no por el baile mismo sino por una obra de teatro.
Historia de avatares, en la que una joven a punto de casarse, se enfrenta de pronto al suicidio del padre ante la infidelidad de la madre y en lugar de caminar vestida de blanco hacia el altar, se le derrumba el horizonte hasta convertirse en prostituta.
Ahora, un registro fotográfico de lo que ha sido este musical se expone desde el 5 de marzo en la Fundación Sebastián, Patriotismo 304, colonia San Pedro de los Pinos.
La aventura de la Aventurera continúa.